Lo construyeron ante la necesidad de reforzar la frontera después de la pérdida del Rosellón y la Cerdeña. El castillo está situado sobre una colina y tiene magnificas vistas panorámicas, razón de haber escogido este lugar.
La fortaleza ocupa una superficie de 320.000 m2, 550.000 m2 si se incluye el espacio de sus "glacis". Estas dimensiones colosales lo hacen el monumento más extenso de Catalunya y la mayor fortaleza baluardada de Europa.